Cada lunes una nueva entrada con una noticia sobre Historia, Arte, Geografía, Bibliografía, Patrimonio, Fotografía, Hemeroteca, ... de nuestro pueblo: BURGUILLOS

Historia, Patrimonio, Arte, Bibliografía, Hemeroteca, ... sobre nuestro pueblo: BURGUILLOS

lunes, 30 de diciembre de 2019

Hemeroteca: La construcción de la carretera de Alcalá del Río a Burguillos, según la noticia aparecida en "El Liberal", del 4 de agosto de 1880.

   Mostramos en "Historia de Burguillos" la noticia recogida en "El Liberal", editado en la capital del reino, sobre la construcción de la carretera de Alcalá del Río a Burguillos, publicado el 4 de agosto de 1880, y que se conserva en el archivo de la Biblioteca Nacional de España. 
   Este diario matutino comienza a publicarse el sábado 31 de mayo de 1879 y dejará de hacerlo el 28 de marzo de 1939, al ser incautado por el “nuevo” Estado dictatorial del general Franco. Durante sus sesenta años de vida tuvo una orientación liberal republicana moderada y en la segunda década del siglo veinte alcanzó una de las mayores tiradas de la prensa española, siendo el prototipo de los grandes periódicos populares y el más leído entre las capas obreras, “por su lenguaje claro y contundente, su preocupación por los problemas de los trabajadores, sus informaciones rigurosas y exhaustivas y un cierto sensacionalismo”, tal como ha expresado María Dolores Sáiz.
   Nace de la disidencia encabezada en el seno de El imparcial (1867-1933) por quien Eduardo Gasset y Artime (1832-1884) había cesado anteriormente como su director y mano derecha, Mariano Araús Pérez (1836-1901), e Isidoro Fernández Flórez (1840-1902), ya conocido como Fernanflor, quien había proyectado y dirigido durante los últimos cinco años el suplemento Los lunes de El imparcial, a los que se unieron los antiguos socios de Gasset, Mariano Milego y el crítico taurino Eduardo de la Loma, además de otros redactores y trabajadores. El motivo del cisma fue la mudanza ideológica de El imparcial al aceptar al régimen monárquico alfonsino y la política personal de Gasset que chocó contra las convicciones de sus redactores.
   El liberal nació así como un diario absolutamente independiente con fuertes raíces democráticas, al amparo de la nueva ley de prensa del siete de enero de 1879 a través de la cual empieza a “levantar cabeza” la prensa republicana, a la vez que la poderosa izquierda dinástica fragua en el fusionismo y el liberalismo sagastino.
   Araús será su primer director y a su redacción se sumarán otros periodistas que habían abandonado el diario de Gasset el 19 de mayo de 1879, como Julio Vargas Machuca, Francisco de Asís Pacheco, José María Anchorena, José Fernández Bremón o Manuel María González, todos ellos de ideología republicana.
   Nace en pugna con El imparcial, con el que entablará una enconada rivalidad, y su pronto éxito será debido a un exquisito equilibrio entre información y opinión y al tono literario de sus editoriales, infrecuente en la prensa de la época, junto al carácter popular de algunas de sus informaciones, que rozarán cierto sensacionalismo, y que tendrán su mayor exponente con el crimen de la calle Fuencarral y el caso Mussó.
   Peñaflor, que será su mayor accionista fundador, intentará, ya el dos de junio de 1879, emular al suplemento de su adversario creando y dirigiendo Los lunes de El liberal, que al año siguiente se transformará en el suplemento Entre páginas, que aparecerá jueves y domingos, en donde ya empezará a sobresalir la pluma de Miguel Moya Ojanguren (1856-1920), quien asumirá la dirección del diario a partir de 1890.
   Será un periódico de gran formato, compuesto a cuatro columnas al principio y que después irá aumentando en número, insertando en su primera página los editoriales y artículos de fondo, y con secciones para las crónicas parlamentarias, las noticias de provincias, los telegramas del extranjero de la agencia Fabra, disposiciones oficiales, las crónicas locales, las cotizaciones de bolsa, la de espectáculos, cultos, libros y notas meteorológicas. Columnas como “A vuela pluma” y “Plato del día” tendrán la firma de Mariano de Cavia (1855-1920), que a la vez hará crítica taurina bajo el seudónimo de Sobaquillo a partir de su ingreso en la redacción en 1881. Será asimismo el periódico que introducirá y afianzará los anuncios por palabras, insertará necrológicas sin el símbolo de la cruz, adoptando el diario a la vez un anticlericalismo crítico, y prolongará el folletón típico francés. A partir del nueve de julio de 1889 aparecerá junto a su cabecera la leyenda de ser “el periódico de mayor circulación de España”.
   En 1901, El liberal lleva a cabo una etapa de expansión, creando una cadena de periódicos con el mismo título en Barcelona, Bilbao, Murcia y Sevilla y, en 1906, Moya junto al gerente del diario, Antonio Sacristán, como herederos de Fernanflor, crearán, la Sociedad Editorial de España, el gran Trust de la prensa empresarial española del periodo, al que quedan adscritos El imparcial y Heraldo de Madrid (1890-1939), junto a otras cabeceras, y de la que serán máximos accionistas, siendo Moya el presidente de su consejo de administración. A partir de 1907 su nuevo director será Alfredo Vicenti (1850-1916), uno de los mejores editorialistas de la época, que había ingresado en su redacción en 1896. A su muerte le sustituirá en la dirección Enrique Gómez Carrillo, redactor desde 1893 y redactor jefe desde 1907, y entre 1917-1923, Antonio Moya Gastón. Los diarios del Trust serán los de mayor circulación de la época, alcanzando una tirada conjunta de más de 435 mil ejemplares.
   El liberal seguirá siendo el representante de la gran prensa republicana moderada más a la izquierda y no partidario, de ideología democrática y socializante, tal como lo describe Maria Cruz Seoane. Aún así, llegará a ser portavoz del Partido Reformista de Melquíades Álvarez, hará oposición al ministerio de Antonio Maura y ofrecerá una opinión favorable al Partido Liberal, al principio en la persona de Segismundo Moret, después en la de José Canalejas y, por último en la del conde de Romanones (Álvaro Figueroa y Torres). Durante la primera guerra mundial se caracterizará por su francofilia, llegando a estar subvencionado por el Comité de Prensa francés, aunque al final de ella observará una “estricta neutralidad” que resultaría chocante.
   Según las estadísticas oficiales, durante la segunda década del siglo veinte alcanzará los 120.000 ejemplares diarios, una de las más altas tiradas de la prensa de la época, de los que prácticamente la mitad serán suscripciones, considerándose más un periódico de difusión madrileña, firme defensor de la libertad de expresión, que leen las capas populares de la pequeña burguesía y las clases trabajadoras, lo que origina una rivalidad de la prensa estrictamente obrera contra el.
   Un nutrido grupo de redactores protagonizarán un cisma más a la izquierda en el seno de su redacción, y el 13 de diciembre de 1919 fundarán La libertad, que será dirigida por Luis Oteyza y de la que Antonio de Lezama será su redactor jefe. Entre los que se pasan a la nueva redacción se encuentran también Luis de Zulueta, Pedro de Répide, Augusto Barcia, Manuel Machado, Alejandro Pérez Lugín, Ezequiel Endériz, Antonio Zozaya y el fotógrafo Alfonso.
   En 1923 El liberal será vendido a los hermanos Manuel y Juan Busquets, empresarios catalanes y máximos acreedores del Trust, que crearán la Sociedad Editora Universal. Será nombrado director Eduardo Rosón, al que pronto le sustituirá Francisco Villanueva, hasta 1927, siendo incorporado como redactor jefe Rafael Morayta y, como confeccionador, Manuel Font. Intensificará su línea izquierdista adoptando una de las posiciones más radicales a la dictadura primoriverista, de la que sufre persecución.
   En el primer tercio del siglo veinte, uno de sus más distinguidos colaboradores fue Miguel de Unamuno, y entre otros fueron sus redactores o colaboradores, además de los ya citados y que fundaron La libertad, Luis Morón, corresponsal en la guerra cubana; Mariano Martín Fernández, que llegó a ser su redactor jefe en 1907; Luis Araquistáin y Ramón Pérez de Ayala, que fueron corresponsales en Londres durante la guerra mundial; Joaquín Dicenta y Adolfo Marsillach, corresponsales en Barcelona; Arturo Mori, Jaime Torrubiano, Rafael Torres Endrina, Leopoldo Bejarano, Artemio Precioso, José Venegas, Francisco Vera, Manuel Delgado Bareto, Antonio Rodríguez Lázaro, Carlos del Río y Julián Settier.
   El liberal pertenecerá al grupo destacado de la prensa española que contribuirá al advenimiento de la II República. Durante el primer bienio apoyará al gobierno de Manuel Azaña, y situándose en un republicanismo de izquierda moderado, seguirá siendo uno de los diarios más leídos, ahora con formato más reducido y un número de páginas que alcanza las dieciséis.
   Entre sus periodistas del periodo republicano se encuentran Emiliano M. Aguilera, José Manuel de Armiñán, Roberto Castrovido, Marcelino Domingo, Edmundo González Blanco, Gabriel Greiner, José Rocamora, Pedro Massa y F. Valera, como editorialista. Entre 1937 y 1938, su director fue Emilio Ayeusa y, en 1939, Manuel Rosón Ayuso. Tras entrar las tropas franquistas en Madrid y ser incautado, de sus talleres empezó a salir el diario Madrid. Los herederos de los Busquets iniciaron en la década de los cincuenta un proceso, que aún en 2011 continuaba, para que el Estado les indemnice por los bienes incautados de la Sociedad Editora Universal.
   Pues bien, en la primera página de la edición del 4 de agosto de 1880, a cuatro columnas, en las que en la tercera (parte superior), aparece una pequeña reseña bajo el titular "La Gaceta." (de las 7 que consta), siendo la que nos interesa, la sexta y que transcribimos íntegramente:
Página 1 del periódico "El Liberal" del 4 de agosto de 1880.
 "SUBASTAS.- Dentro de treinta dias subastará la diputacion de Sevilla la construccion del trozo de carretera de Alcalá del Rio a Burguillos, en 99.990,44 pesetas; los acopios de materiales para conservacion de la de Sevilla á Alcalá del del Rio, en 71.645, y la construccion del trozo entre Itálica Iasabelina y Dos Hermanas, en 93.034,23."
   Con esta noticia ya podemos ponerle fecha a la realización de la carretera que nos une a la capital a través de Alcalá del Río, algo que hoy puede parecer baladí, pero que en la época supuso nuestra conexión con el mundo moderno, y todo lo que ello conlleva: un paso más en la modernización de nuestro pueblo, siendo otro documento más el devenir histórico de nuestro pueblo.

lunes, 23 de diciembre de 2019

Bibliografía: Capítulo XXXVII "Un comensal más" del libro "El señorío de Burguillos (Sevilla); una aproximación a su historia" de Francisco Rodríguez Hernández, de 1999.

   Mostramos en Historia de Burguillos el capítulo XXXVII del libro "El señorío de Burguillos (Sevilla); una aproximación a su historia", de Francisco Rodríguez Hernández, editado por el Ayuntamiento de Burguillos y la colaboración de la Diputación de Sevilla en 1999, y que trata sobre Un comensal más, ocupando las páginas 165 a 167 de dicha monografía y que pasamos a transcribir íntegramente:
Pág. 165 del libro "El señorío de Burguillos (Sevilla); una aproximación a su historia".
Un comensal más
   Ya hemos visto en referencias anteriores, entre quiénes estaba distribuido el término de Burguillos, desde la Reconquista, que como propietarios disfrutaban de las pingües rentas que producían sus saneados patrimonios.
   Así hemos señalado, la presencia de la Corona, la Iglesia, la nobleza, conventos, colegios de órdenes religiosas etc.
   Ahora, y de una manera breve, vamos a agregar un comensal más a la mesa en que se celebra la degustación de esta suculenta tarta, de la cual, solo estaban excluidos los pobres jornaleros pertenecientes a las capas bajas de la sociedad.
   La escritura que voy a invocar consta de ocho hojas, pero nos bastará dedicar nuestra atención a la primera, para dar a conocer lo esencial de su contenido.
   La he encontrado en el archivo de la Diputación Provincial de Sevilla, y está fechada en 1540.
   No la voy a transcribir en su totalidad, bastará con un fragmento, y desde luego modernizando la ortografía y eliminando arcaísmos; dice así:

          Sepan cuantos esta carta vieren, como yo, Juan de Miranda, clérigo presbítero, vecino de esta ciudad de Sevilla, en la collación de San Román, en nombre y en voz, y como administrador que soy del hospital de los bienaventurados San Cosme y San Damián, donde se acogen y allegan, los pobres enfermos del mal de la bubas, que es en esta dicha ciudad, en la collación de San Salvador, otorgo y conozco, que arriendo a vos, Bartolomé Sánchez Aguado, labrador, vecino del lugar de Burguillos, que está de presente, la cuarta parte de las tierras del donadío de pan sembrar, que se dice El donadío de la Barquera, que es en término de dicho lugar de Burguillos, que linda, de la una parte con el donadío de los Alazanes, y de la otra parte con el donadío que se dice de San Agustín [...].

   Con esto creo que basta; las restantes tres cuartas partes de la finca son arrendadas a los vecinosde Burguillos, Francisco Martín, Andrés Márquez y Juan Esteban de los Salvadores, labradores. Lo que sigue es lo de siempre en este tipo de escritura; insistir una y otra vez en la firmeza en el pago del arriendo y otros legalismos, etc.
   Al referirnos al Hospital de las Bubas, hemos de señalar, que en principio se llamó de la Misericordia, y que "permaneció en su edificio de la plaza del Salvador hasta 1559, en que se trasladó al edificio donde se había fundado el de las Cinco Llagas". (Historia de la Iglesia de Sevilla, Varios, pág. 239).
Pág. 166 del libro "El señorío de Burguillos (Sevilla); una aproximación a su historia".
   El acta fundacional se encuentra en el archivo de la Diputación Provincial de Sevilla, legajo 3, pergamino 122 y fecha 3 de mayo de 1387. He visto asimismo, un acta de Patronato de fecha 4 de noviembre del mismo año.
   También se encuentra entre estos documentos Carta de Merced del Cabildo y Regimiento de Sevilla al Hospital de las Bubas, para que pueda nombrar cuatro hombres pecheros, para pedir limosnas por las calles de la ciudad, tocando unas campanitas. Pergamino 124. Fecha 1º de septiembre de 1389.
   El 8 de noviembre de 1512, se establecen las ordenanzas de la Cofradía Hermandad del Hospital de San Cosme y San Damián.
   El 7 de agosto de 1526, el señor provisor y vicario general del arzobispado, autoriza al Hospital, a que durante un año, pueda pedir limosnas en las iglesias, para el mantenimiento de un pobre.
   Y finalmente su santidad el papa Pío V (1566-1572) da licencia al Hospital, en 1568, para poder vender los tributos pequeños, pertenecientes al mismo, y con su producto comprar otros más útiles.
   Verdaderamente la relación de municipios, entidades, instituciones y personas que eran tributarias del citado Hospital era muy extensa, como he tenido la oportunidad de comprobar, entre las cuales figura Burguillos.
   Es innegable que con la venta de muchos pequeños tributos, se llegó a comprar la valiosa finca de la Barquera. Y no solo esa, pues en la inscripción que hago del donadío de Mudapelo, se advierte que esta finca "linda con tierras del cortijo del Alazán, propiedad del Hospital de las Bubas, que había sido anteriormente de Jorge de Medina, Caballero veinticuatro".
   Los otros dos cortijos que se mencionan en la escritura, fueron propiedad a este tenor:
   San Agustín, del Colegio de San Hermenegildo de la Compañía de Jesús, desde 1596 en que se lo adquirieron, hasta 1770 en que fue vendido. Y el de la Trinidad, que pertenecía a la familia de Esquivel, a cuya propiedad acabó incorporándosele la Barquera.
   Hemos de terminar asegurando, que este Hospital prestó innumerables servicios de atención al enfermo afectado del mal de las bubas, enfermedad venérea muy extendida en aquellas edades. Su extinción se produjo con el cierre del Hospital Provincial de Sevilla, sito en la Macarena, llamado de antiguo indistintamente de la Sangre, o de las Cinco Llagas. A la sala de San Cosme y San Damián, se le llamó en los últimos tiempos el Sifilicomio.
Pág. 167 del libro "El señorío de Burguillos (Sevilla); una aproximación a su historia".

lunes, 16 de diciembre de 2019

Callejero de Burguillos: La calle Bardana.

   Mostramos imágenes (realizadas por Google Maps en septiembre de 2008) de la calle Bardana, en Burguillos.
Rótulo de la c/ Bardana
   La calle (desde el punto de vista urbanístico, y como definición, aparece perfectamente delimitada en la población histórica y en los sectores urbanos donde predomina la edificación compacta o en manzana, y constituye el espacio libre, de tránsito, cuya linealidad queda marcada por las fachadas de las edificaciones colindantes entre si. En cambio, en los sectores de periferia donde predomina la edificación abierta, constituida por bloques exentos, la calle, como ámbito lineal de relación, se pierde, y el espacio jurídicamente público y el de carácter privado se confunden en términos físicos y planimétricos) está dedicada a la Bardana, que es el nombre de la planta medicinal que crece de forma silvestre en nuestros campos. Su nombre botánico es Arctium lappa.
Callejero oficial del Ayto. de Burguillos con la ubicación de la c/ Bardana.
Mapa de Burguillos con la situación de la c/ Bardana.
Fotografía aérea de la c/ Bardana.
   La bardana  –y la especie afín, también usada en fitoterapia, la bardana menor Arctium minus– es una planta bienal –dura dos años–, robusta, de hasta metro y medio de alto, con hojas basales enormes, de hasta 60 cm de largo, de forma acorazonada y hojas superiores más reducidas. Las flores se agrupan en inflorescencias redondas, recubiertas de brácteas en forma de púas. Las flores son de color rosado o púrpura. Florece a partir de mediados del verano.
   Crece sobre suelos removidos, muchas veces cerca de núcleos habitados, en riberas, barrancos, escombreras, descampados y márgenes de caminos. La bardana mayor es muy común en toda Europa, pero en la península Ibérica sólo aparece en los Pirineos, mientras que la bardana menor es también abundante en el sur de Europa.
Planta de la Bardana.
   La parte de valor medicinal en la bardana es la raíz. La cosecha se realiza generalmente en primavera, cuando está a punto de desarrollar el tallo y por lo tanto bastante antes de la floración. Los expertos opinan que las plantas envejecidas ya no sirven, porque sus raíces han perdido buena parte de sus principios activos, y porque al haber profundizado tanto, cuestan mucho de arrancar, pero hay quien también las usa. Una vez cosechadas se lavan a conciencia, se cortan en tiras o en segmentos y se dejan a secar en un lugar sin humedad ambiental. Se conservan troceadas o en polvos.
   La bardana es una planta aliada de la salud de nuestra piel, del riñón y las vías urinarias, y los herbolarios la incorporan en muchos de sus remedios depurativos, diuréticos, antibacterianos y antisépticos a nivel renal y urinario.
   Se le atribuyen también propiedades aperitivas (activan el apetito), digestivas, astringentes, ligeramente hipoglucemiante, coleréticas (activa la producción de bilis), desintoxicantes y cicatrizantes.
Dibujo botánico de la Bardana.
   Las principales indicaciones y beneficios de la bardana para la salud quedan resumidas a continuación: Infecciones urinarias, como la cistitis, la ureteritis, la prostatitis y la nefritis o inflamación del riñón. Favorece la emisión de orina y neutraliza los focos infecciosos. Te ayuda a prevenir la formación de piedras en el riñón y una vez desarrolladas, en una primera etapa, puede favorecer su expulsión con la orina. Es muy eficaz para tratar la retención de líquidos y los edemas. Puede ser un apoyo para el tratamiento de la diabetes mellitus, pero asociada a plantas que refuercen su acción, como la gymnema, la galega y otras. Resulta excelente para estimular la eliminación o reducción de los excesos de urea y ácido úrico, en casos de hiperuricemia leve y ataques de gota. Se la incluye en formulaciones para el tratamiento a largo alcance de la hipertensión arterial, como un diurético natural, que te aporta potasio de manera directa. Una alternativa a explorar a los medicamentos antihipertensivos que actúan como diuréticos. Estimula la producción de bilis y ayuda a despertar el apetito. Se ha indicado en alteraciones hepatobiliares leves, indigestiones y empaches. La bardana destaca sobre todo como planta depurativa, que te ayudará a combatir las impurezas que quedan reflejadas en tu piel por efecto de la acumulación de toxinas. Se usa a fondo en el tratamiento de problemas dermatológicos diversos, como el acné juvenil, urticarias, eccemas, abscesos, dermatitis seborreica y como apoyo en la psoriasis. Se aplica en uso tópico sobre heridas, úlceras de la piel, llagas, picaduras de insectos, forúnculos, etcétera. Se aplica también sobre dermatitis atópica, queratosis pilar (protuberancias en la parte posterior de los brazos) e ictiosis vulgar (escamación, resecamiento y picazón). Tiene virtudes antifúngicas y antibacterianas y se muestra muy útil para combatir las infecciones por hongos o dermatomicosis como el conocido pie de atleta (géneros Trychophytum, Epidermophyton…), la pitiriasis versicolor (levadura del género Malassezia, presente en la flora cutánea, con potencial contagioso) y la cándida, aunque con irregular éxito.
Inicio de la c/ Bardana.
   La bardana es, en líneas generales, una planta segura, pero al actuar a nivel hepático y renal, debes tener en cuenta determinadas medidas de precaución o contraindicaciones en su consumo: Si eres hipertenso o sufres algún tipo de patología cardíaca, antes de iniciar un tratamiento de largo alcance con bardana, debes consultar con tu médico, para evitar posibles descompensaciones, sobre todo si tomas medicación. Por la presencia de taninos, no se recomienda en el embarazo y tampoco en el periodo de lactancia. Al suponer un aporte importante de potasio, recuerda que su consumo podría potenciar el efecto de los medicamentos cardiotónicos.
Final de la c/ Bardana con el IES Burguillos al fondo.
   La calle Bardana está situada en el barrio de La Ermita. Va de la calle Melisa a la calle Albahaca, y tiene una longitud de 75 metros aproximadamente, siendo unidireccional desde el punto de vista del tráfico rodado en sentido descendente, asfaltada y alumbrada por farolas funcionales. Está conformada por pocas viviendas unifamiliares de autoconstrucción de una y dos plantas en altura, formando parte de una zona residencial, desembocando en el frontal del I.E.S. "Burguillos", edificio más emblemático de la zona.
Vista de la c/ Bardana desde la c/ Albahaca.
   La calle Bardana es, históricamente, una vía moderna, puesto que fue creada con el boom inmobiliario que se produjo en nuestro pueblo a comienzos del siglo XXI y junto al hecho de ser eminentemente residencial, hace que tenga tan sencillo comentario.

lunes, 9 de diciembre de 2019

Biografías de Burguilleros Ilustres: Marifé de Triana (1936-2013).

   Mostramos en Historia de Burguillos, la biografía de una de nuestras hijas más ilustres, María Felisa Martínez López, "Marifé de Triana", que paseó el nombre de Burguillos por todo el mundo.
   MARÍA FELISA MARTÍNEZ LÓPEZ, una de las grandes artista paya de la canción española, nace en el pintoresco pueblo sevillano de Burguillos, el 13 de septiembre del año 1936, pasó sus primeros años en el populoso arrabal de Triana, de donde tomaría su apellido artístico de MARIFE DE TRIANA. Trasladada la familia a Madrid, se fue despertando en María es profunda afición a cantar que había sentido en su alma desde niña. Y tras un corto periodo de estudios en academias de canto, saltó decididamente al atractivo mundo del arte y de la canción folklórica. Como el de casi todas las tonadilleras, sus principios fueron muy duros, ya que nunca contó con mas ayuda que su inmensa fe en sí misma y en la de su arte inigualable. Pero, como a todos en la vida, le llegó su gran oportunidad: el gran promotor de espectáculos Juan Carcellé, descubridor de tantas artistas, la contrató rápidamente al verla actuar en una localidad cercana a Madrid, comentando: “Jamás nadie ha cantado como esta mujer. Ella es la renovación absoluta de la canción andaluza”. Marife de Triana falleció en la madrugada del sábado día 16 de febrero de 2013, en la localidad malagueña de Benalmádena.
Panel de azulejos conmemorativo del lugar del nacimiento de Marifé de Triana en la c/ Portugal.
   Así presentada por Carcellé, debutó en el madrileño Coliseo de Price, encabezando un gran espectáculo de variedades, e interpretó de forma tan magistral la copla andaluza, que obtuvo un éxito colosal y rotundo. El escritor Álvaro Retama, la vio así: “Linda y joven, acusaba cierto temperamento artístico, acentuando al colocarse bajo la advocación del trío Quintero, León y Quiroga”; y perfeccionando su mímica y consagrándose a la canción folclórica, logró estar en el cartel durante tres meses consecutivos, algo insólito en aquellos tiempos. La puertas del éxito ya estaban, afortunadamente, abiertas de par en par para esta hermosa sevillana, siendo desde este instante su carrera una de las mas vertiginosas que se han conocido en el mundo de la canción. Las casas discográficas se disputaban su contrato, apareciendo en el mercado su primer disco, que constituyó otro éxito inenarrable, con esa preciosa canción “Torre de Arena”, de Lladrés, Gordillo y Sarmiento, donde Marifé de Triana va despuntando ya como actriz de la canción, con unas dotes extraordinarias y una voz clara y potente, dominadora de todas las situaciones líricas.
Fotograma de la visita en 1990, de Marifé de Triana al ayuntamiento de Burguillos, junto al por entonces alcalde, José Cuesta.
   “Torre de Arena”, ocupó el primer lugar en las listas de los discos mas vendidos de los años cincuenta y sesenta, impacto desconocido como no fuese en Conchita Piquer, Antoñita Moreno o Juanita Reina. A raíz del enorme éxito discográfico, Marifé de Triana formó, como empresa de su propio espectáculo, el titulado Torre de Arena, recorriendo los principales teatros de toda España, en clamoroso éxito, durante mas de dos años ininterrumpidos, ¡Otro éxito de continuidad desconocida en el teatro español!. Después será apreciada como actriz de la canción, calificándola así la prensa de toda España, título que Marife de Triana lleva en su corazón con el máximo orgullo. Y ya sus éxitos son continuados, ininterrumpidos, ocupando durante la década de los años cincuenta y sesenta el primer puesto en la canción andaluza. Se suceden uno tras otro sus espectáculos, destacando, tras el apoteósico Torre de Arena, que fue una autentica revelación, La Emperaora, La sombra, Carrusel de España, Coplas al viento, La maestra Giraldilla, Torre de Coplas, La niña de Agualucero, Embajadora de España, La cantaora, El café del Taranto, Maria Maletilla, Cabalgata...etc...
Marifé de Triana.
   Y entre espectáculo y espectáculo, giras internacionales por Méjico, Venezuela, Argentina, Perú, Chile, Francia, Bélgica, Alemania, Holanda, Suiza, Inglaterra y Estados Unidos, actuando en las cadenas de televisión de todos estos países, así como en la de España, siendo contratada rápidamente para el cine, interpretando dos películas que supusieron un éxito de taquilla: “Canto para ti” y “Bajo el cielo andaluz”.Marifé de Triana, artista de singulares condiciones, temperamenteal y humana, está en posesión de multitud de premios y galardones, imposible de enumerar, premios nacionales y extranjeros, aunque el que ella considera en sincera estima es el otorgado por la Sociedad General de Autores de España, en reconocimiento a sus valiosos méritos como artista única en su estilo.. Lleva grabadas unas quinientas canciones que se reeditan constantemente. Todas y cada una contienen la misma dulzura, el mismo sentimiento y la misma entrega que cuando fueron cantadas por primera vez, La Loba, Bajo un limón limonero, Puente de Plata, Me va tu piel, La Rosa de Capuchinos, Calandria Calandria, Plegaria por un torero, Encrucijada...etc...Tras difíciles momentos emocionales, se casó en Madrid el 7 de octubre de 1982, con José Maria Calvo, al que conocía desde hacía más de treinta años. En mayo de 1989 presento con éxito su disco Vendedora de coplas, con indudable éxito. Al siguiente año el ayuntamiento de Burguillos rotuló con el nombre de la artista una céntrica calle de su pueblo natal. Fue todo un acontecimiento popular, en el que quedó demostrado el amor que sus paisanos profesan hacia su más popular artista.
Una última imagen de la tonadillera burguillera.
   Esta es, de manera sintética, una pequeña biografía de Marifé de Triana, recogida de la web El Arte de Vivir el Flamenco.

lunes, 2 de diciembre de 2019

Hemeroteca: Un asesinato en las inmediaciones de Burguillos, según la noticia aparecida en "La Igualdad" del 16 de abril de 1880.

   Mostramos en "Historia de Burguillos" la noticia recogida en "La Igualdad", editado en la capital del reino, sobre un asesinato cometido en las inmediaciones de nuestro pueblo, publicado el 16 de abril de 1880, y que se conserva en el archivo de la Biblioteca Nacional de España. 
   "La Igualdad", está considerado como el órgano de prensa más cualificado del federalismo español del periodo, en el que se verán representadas todas las tendencias del republicanismo, “en la intención, al menos” (Gómez Aparicio: 1971), y representante de “la línea oficial del partido” (Pérez Roldán: 1999), que aparecerá el once de noviembre de 1868 y estará publicándose durante todo el Sexenio Democrático, hasta el 30 de diciembre de 1874, cuando el golpe del general Arsenio Martínez Campos (1831-1900) en Sagunto de paso a la Restauración y sea suspendido al igual que los demás periódicos republicanos, aunque volverá a reaparecer desde el 16 de abril al tres de noviembre de 1880. Será un diario típico de la época, de cuatro páginas, compuesto a cuatro y, después, a cinco columnas, al principio vespertino y estampado en papel de buena calidad y, más tarde, matutino, contando con imprenta propia. Tuvo variaciones en el formato y en el subtítulo, y fue denunciado y suspendido en varias ocasiones.
   Aunque se desconoce con exactitud su difusión, fue uno de los de mayor circulación del periodo septembrino, con tiradas que no bajaban de los 15.000 ejemplares , y cuyas suscripciones para provincias –debido a su carácter federal– logran alcanzar hasta el 80 por ciento del total (Seoane: 1996), compartiendo el campo de la prensa republicana con otros dos grandes diarios, como La Discusión (1856), fundada por un entonces filoprogresista y después demócrata “cimbrio” Nicolás María Rivero (1814-1878), y El Pueblo (1860), de Eugenio García Ruiz (1819-1883) y principal exponente del sector “unitarista”, que, tras haber quedado suspendidos, en 1866, por el gobierno de Leopoldo O’Donnell (1809-1867), reaparecen ahora tras la Septembrina.
   Los fundadores de La Igualdad fueron el médico José Guisasola Goicoechea (1833-), quien al principio compartió la propiedad con Alfredo Vega, así como Francisco García Padrós. A partir del 18 de mayo de 1869 se refundirá en un sólo periódico con El Amigo del pueblo, el primer periódico democrático federalista que había aparecido tras el triunfo revolucionario, el 30 de septiembre, fundado y dirigido por Francisco García López (1824-1878) y Carlos Martra y Roger (-1879), y que dirigirá también José Paúl y Angulo (1842-1892), en un momento el que este diario tendría una tirada de unos 4.000 ejemplares, que sumará a los 8.600 de La Igualdad, que seguidamente logrará alcanzar hasta los 21.000 ejemplares (Seoane: 1996). Con la unificación de ambas redacciones, “logró el más completo conjunto de escritores republicanos” de aquél tiempo (Gómez Aparicio: 1971).
   En la redacción de La Igualdad se darán cita “las más relevantes figuras de la intelectualidad republicana” (Gómez Aparicio: 1971). Entre quienes lo dirigieron se encontraron Estanislao Figueras (1819-1882), Adolfo Joarizti (1835-1871), José María Orense (1803-1880), los citados Martra y García López, así como el médico Ramón Cala (1827-1902), Andrés Mellado (1846-1913) y el citado Paúl y Angulo, estos tres procedentes de la redacción de El Amigo del pueblo. El último, después de vender parte de su propiedad de La Igualdad, pasaría a fundar y dirigir el “intransigente” El Combate, de corta vida, desde el uno al 25 de diciembre de 1870, de los que serán también redactores los citados Guisasola y Cala, entre otros, pero éste volverá a reaparecer entre el uno de febrero y el 27 de septiembre de 1872, pero ya sin Paúl y Angulo.
   Entre los redactores de La Igualdad estuvieron Fernando Garrido (1821-1883), Juan Sala Escalada (-1891), César Ordax -Avecilla (1844-1917), Francisco Bañares (-1884) o Juan Escobar Moreno, y entre sus colaboradores, Francisco Pi y Margall (1824-1901), Roque Barcia (1823-1885), Eduardo Chao (1822-1887), Luis Blanc o los generales y hermanos Blas y Fernando Pierrad, así como los citados Martra y Roger y Nicolás Salmerón (1838-1908), procedentes también estos dos últimos de la redacción de El Amigo del pueblo, entre otros muchos. En su primer número, el periódico inserta bajo su cabecera la nómina de sus redactores y colaboradores. Excepto alguno, todos ellos mantuvieron una estrecha relación con el periodismo, la vida política, revolucionaria e institucional.
   La Igualdad fue un periódico antimonárquico, anticlerical y antimilitarista, “prototipo del periodismo de opinión”, cuyos artículos de fondo ocupan un gran espacio y cuyas noticias son siempre comentadas e interpretadas (Seoane: 1996). Solía insertar los manifiestos e instrucciones de los dirigentes del republicanismo, movimiento que protagonizará una insurrección a partir de octubre de 1869, momento en el que su tirada alcanzaría los 36.000 ejemplares, siendo suspendido desde el 13 de ese mes hasta el uno de diciembre de ese año (Seoane: 1996). Movimiento que celebrará su primera Asamblea Federal en marzo de 1870, constituyéndose el Partido Republicano Democrático Federal, cuyo presidente será Pi y Margall. Dos meses después, el siete de mayo, los periódicos republicanos insertarán la denominada Declaración antipactista, crítica con Pi y sus ideas socialistas, momento en el que Mellado fue cesado y sustituido en la dirección de La Igualdad por Manuel Francisco Paúl y Picardo (1834-), y seguidamente por Eduardo Benot (1822-1902).
   Hasta dos días después, el 29 de diciembre de 1870, no aparecería en las páginas de La Igualdad ninguna alusión al atentado mortal del general Juan Prim (1814-1870), y cuando lo haga será a través de la reproducción escueta de la noticia ofrecida por otros periódicos. El dos de enero de 1871 publicará una “cruel bienvenida” al rey Amadeo, y los otrora ataques a Prim los lanzará ahora contra Manuel Ruiz Zorrilla (1833-1895). Ante las acusaciones de culpabilidad por el magnicidio, Paúl y Angulo y Guisasola tuvieron que abandonar definitivamente España, y Roque Barcia, por su parte, negará en un artículo publicado en La Igualdad, el 21 de febrero de 1871, la relación de los federalistas con el magnicidio del general.
   Tras la II Asamblea Federal, celebrada en abril de 1871, La Igualdad continuó siendo portavoz de los denominados “intransigentes”, de Pi y Margall, mientras que La Discusión lo será de los “benévolos”, de Emilio Castelar (1832-1899), que en junio de ese año apoyarán al gobierno del Partido Demócrata Radical, presidido por Ruiz Zorrilla.
   Para este título véanse además los artículos de Enrique Giménez (1975) y de Carmen Pérez Roldán (1999) y la tesis doctoral (2003) de esta última sobre el republicanismo madrileño del sexenio (1868-1874).
   Pues bien, en una de sus páginas de la edición del 16 de abril de 1880, a cuatro columnas, en las que en la primera (parte inferior), aparece una pequeña reseña bajo el titular "NOTICIAS." (de las 41 que consta), siendo la que nos interesa, la séptima y que transcribimos íntegramente:
Página del periódico "La Igualdad" del 16 de abril de 1880.
 "La Guardia civil de Castilblanco, Sevilla, ha capturado á cuatro sugetos, autores de un asesinato cometido la noche del 3 del actual en las inmediaciones de Burguillos."
   Complicado está, por no decir imposible, averiguar quienes son esos presuntos asesinos y el asesinado, y si tenían relación o no con nuestro pueblo, puesto que no han aparecido, hasta hoy, más noticias referentes al mismo en otros periódicos de la época, pero ello no es óbice para constatar en otro documento más el devenir histórico de nuestro pueblo.