Mostramos en Historia de Burguillos la reseña que se hace de nuestro pueblo en el libro "Índice del Tumbo de los Reyes Católicos del Concejo de Sevilla", editado por la Revue Hispanique, dirigida por R. Foulché-Delbosc, Tomo LXXII, Número 141, en octubre de 1924, cuyo ejemplar podemos consultar en el Archivo Histórico Provincial, de Sevilla.
Para entender la importancia de este libro, transcribimos literalmente la introducción:
El municipio sevillano, favorecido con innúmeros privilegios y mercedes desde la Reconquista, guarda aún en su archivo gran riqueza de documentos. Entre ellos atrajo mi atención el llamado "Tumbo de los Reyes Católicos"; al hojearlo comprendí su importancia y en la imposibilidad de publicarlo íntegro, me he limitado a formar el índice de esta colección, trabajo que ha exigido tiempo por la abundancia de materia y sin otra pretensión que la divulgar el conocimiento de tan interesantes manuscritos.
Las cartas reales, sentencias y privilegios del municipio sevillano no estaban, en sentir de los Reyes Católicos, a tan buen recaudo ni tan fácilmente asequibles como era menester, y para remediarlo dispusieron, según nos refiere un documento del Tumbo, que Juan de Pineda, escribano mayor del Consejo, mandase hacer en treinta días, un libro de papel mayor encuadernado y en los veinte siguientes se escribiesen en él todas las cartas e ordenanças, que despues que reinamos -dice la carta- avemos enbiado a esa dicha cibdad sobre qualquier cabsa e razon que sea, e de aqui adelante escribays e fagays escrevir en el dicho libro todas e qualesquier nuestras cartas, alvalaes e çedulas que en el dicho cabildo fueren presentadas. En el comyenço del libro esté una tabla en que se haga minçion delas cartas que alli estan e sobre ques cada una, que se pueda aver razon e cuenta delas dichas cartas e hordenanças cada vez que fuera mandado (es el número 1370 de este índice. Se transcribe en el apéndice A). Esta disposición dada el 28 de Mayo del año 1492 y fielmente cumplida por el escribano mayor es el origen del Tumbo y merece elogios, pues, en su virtud podemos leer hoy, una por una, las copias auténticas y contemporáneas de todas las disposiciones de D. Fernando y Dª Isabel presentadas al Concejo de Sevilla.
Consta el Tumbo de seis volúmenes en folio, encuadernados con tapas de madera recubiertas de piel curtida: se cierran con manezuelas de piel rematadas en broches de bronce sujetos con clavos del mismo metal. Un número arábigo indicativo del orden aparece en sus cubiertas y lomos.
La signatura antigua puesta sobre la primitiva hoja del índice del tomo primero, dice: "Copias de privilegios en pieles 1-4-159." Todos tienen tres hojas en blanco entre la cubierta y el texto y otras tantas al final.
Se compone el tomo primero de cuatrocientos treinta folios. Las hojas tienen 0,270 x 0,396 y el escrito 0,190 x 0,396, con número variable de líneas cuyo mínimo es de treinta y una y el máximo de treinta y cuatro. Está en blanco el folio nº 408. A las tres hojas en blanco de la cubierta sigue el índice compuesto de once hojas sin foliar encabezado con estas palabras: "Libro primero en que ay çinco años y es el primero del Señor MCCCCLXXIV años." La foliación a partir del primer documento va colocada en el ángulo superior de la derecha y es doble: una antigua, en letras minúsculas; otra moderna, puesta sobre la anterior en cifras arábigas; ambas coinciden. Comienza con el documento número tres de este índice y termina con el cuatrocientos trece del cual solo se copió el epígrafe y se repitió, escribiéndose íntegro en el tomo segundo.
Este comprende trescientos ochenta y seis folios sin contar seis hojas en blanco tras la cubierta, y doce que forman el índice. Su encabezamiento dice: "Libro segundo delas cartas, en que ay çinco años: es el primero de MCCCCLXXX años." Comienza con el documento número cuatrocientos catorce de nuestro índice y termina con el nº ochocientos diez y nueve, pues aunque tiene el epígrafe y una línea de otro documento advierte una nota marginal de distinta letra y tinta. Está en el libro tercero. Es aplicable al tomo segundo cuanto va dicho del primero respecto a tamaño y foliación.
Del mismo tamaño con veinte y cinco a treinta y una líneas están escritos los cuatrocientos setenta y ocho folios del tomo tercero. En el comienzo de los once, sin foliar, que forman el índice de este tomo, se lee: "Libro terçero delas cartas y çedulas de sus Altezas, que presentaron en el muy ylustre Cabildo de Sevilla: çinco años que enpeçaron el año MCCCCLXXXVI en que están las cartas siguientes". Algunos folios como el 99 y el 159 vº, están en blanco desde la mitad. Comienza con el nº 820 de nuestro índice o sea el mismo en que terminaba el tomo anterior y allí estaba incompleto y finaliza en el 1344. Tres foliaciones tiene este volumen: la antigua en letras minúsculas que comienza en el folio CCCLXXXVIII y termina en el DCCCLXIX; la arábiga del 1 al 478 y otra en el ángulo inferior de la derecha, también en letras minúsculas coincidiendo con la anterior.
Algo menos voluminoso es el tomo cuarto compuesto de cuatrocientos cincuenta y dos folios de veintitrés a veinte y ocho líneas. El índice abarca ocho hojas sin foliar y su encabezamiento dice: "Libro quarto delas cartas y çedulas de sus Altezas que se presentaron enel muy ylustre Cabildo dela muy noble e muy leal çibdad de Sevilla en çinco años que enpeçaron el año de mill y quatroçientos y noventa y un años en las siguientes. El folio 158 vº tiene muy poco escrito y el 159 está en blanco y lleva superpuesta una tira de papel en que se lee: "el teniente e el escrivano del Cabildo mandaron dexar estos tres pliegos en blanco (y aun lo estan) para la secutoria del Canpo de Andevalo porque está ental logar que no se puede sacar fasta quel libro se acabe". Igualmente aparece sin escribir el folio 164. Comienza en el nº 1266 de nuestro índice y el 1601 es el último documento de este tomo. Está manchado por la humedad en el ángulo superior de la izquierda.
La hermosa letra de privilegios en que están escritos los cuatro volúmenes anteriores desaparece en el mayor de todos, el quinto, formado con quinientos catorce folios de cuarenta y seis a cincuenta y ocho líneas de letra cursiva de la época, pequeña, mal trazada y por ello así como por el uso de las abreviaturas de difícil lección. Al frente del índice sólo dice: "Libro quinto 1496" y está compuesto de 12 hojas sin foliar. Comienza en el nº 1611 de nuestro índice y termina en el 2203.
El más pequeño de todos es el tomo sexto y último, pues sólo tiene trescientos sesenta folios de la misma letra del anterior y variando el número de líneas de cuarenta y cuatro a cincuenta. Al frente del índice, de 11 hojas sin foliar, va escrito: "Libro sesto. Año de MCCCCXVII años." Los folios 134 vº, 197, 210, 225 vº, 244 vº así como cuatro detrás del 220 aparecen en blanco; escritos sólo hasta la mitad el 197 vº y el 317 vº. No debe estar completo este tomo, puesto que comienza con un fragmento de documento con sólo la fecha (Madrid 16 de Octubre de 1502) y termina en el nº 2686 de nuestro índice: también podría atribuirse esto a desorden en la encuadernación, comprobado al menos, en otros lugares de este volumen.
El papel utilizado en estos libros es de diversa calidad y debe proceder de fábricas distintas a juzgar por las filigranas que se entreven en su pasta: en unos aparece un pato dentro de un círculo con una letra; en otros se dibuja vagamente un pulpo y alguna vez lleva sólo un dibujo con letras.
Fácil hubiera sido mi tarea limitándome a copiar los índices colocados al comienzo de cada tomo, pero al advertir que eran incompletos, inexactos y demasiado breves, opté por hacer papeletas de los epígrafes que preceden a cada documento con la antigua ortografía, utilizable para los filólogos, sin otra adición que poner entre paréntesis lo indispensable para comprenderlos. En los que carecían de epígrafes lo he formado en vista del documento mismo y lo coloco todo entre paréntesis. Resulta, pues, nuestro índice con dos mil seiscientas noventa y nueve papeletas.
Abarca el Tumbo desde el 20 de Diciembre de 1474 hasta el 21 del mismo mes de 1509 o sea un espacio de treinta y cinco años, comprendiendo, por tanto hasta la segunda regencia de D. Fernando V. Van dispuestas las papeletas por orden cronológico y se corrigen, advirtiéndolo al pie, algunos errores cronológicos. Otros, que se vislumbran, no han podido corregirse por faltar elementos de comprobación. Existen además doce documentos de reyes anteriores a los Católicos, copiados en el Tumbo para completar o a clarar disposiciones de éstos: se enumeran en un apéndice (Véase apéndice B) por el mismo orden.
Los lugares desde donde han sido expedidas las cartas reales, si no son dudosos, van escritos con ortografía moderna y los citados en el cuerpo mismo del documento con la que tienen en el Tumbo.
Mediante abreviaturas se indican las copias en que aparecen las firmas reales o la de personajes que autorizaban el documento original.
Como espejo fiel refleja el Tumbo la vida local sevillana de fines del siglo XV. Cuantos personajes figuraron en ella, veinticuatros, jurados, asistentes, alcaldes de la tierra, alcaldes de la justicia, alcaldes de castillos, y aun los de categoría más modesta, como guarda de la saca del pan o de la Casa de la moneda, aparecen citados por sus nombres (Véase el índice de personas); aquí se precisan sus salarios, allá se les confía una misión especial, prueba de la confianza regia, en muchos sitios se pone traba a su ambición ó castigo a su rebeldía como en otros se premian sus méritos y servicios.
Toma enorme relieve en estos documentos el papel de Sevilla en la conquista del reino granadino: envía soldados, bastimentos y dinero, sufre sin desaliento desastres como el de la Ajarquía, auxilian la empresa hasta los italianos residentes en ella, y cuando el triunfo llena de gozo a la ciudad, manda los obreros que trabajaban en la catedral a reparar los derruidos muros de Ronda y Monda ó las bellísimas estancias del palacio de la Alhambra.
Palpitante, entretejida en estos documentos, surje la vida de los Reyes y hablan del gozo del nacimiento del Príncipe D. Juan y nos conmueven con la pena de su muerte; y procuran posadas a Colón en Sevilla y nos emocionan refiriendo el atentado de que fue víctima el Rey en Barcelona, y aparecen bien claras las aficiones musicales de la Reina y la de la caza del Rey. Podemos, en suma, seguir paso a paso la historia de aquel reinado admirable que comenzó por fusionar dos coronas, restablecer el orden, abajar a la nobleza, enaltecer la ciencia, someter y castigar a los rebeldes, y continuó destruyendo el reino de Granada y ampliando los límites de España hasta hacer caber en ellos al más lejano de los mundos.
Cl. SANZ ARIZMENDI
La referencia a Burguillos la encontramos en la página 208, en el documento nº 1966, que pasamos a transcribir literalmente:
1966. Ciudad Real, 28 Marzo, 1500. Carta conplusoria contra Guillena y
Burguillos sobre el pleito del Algaua. s. f. r. [sin firmas reales] V. 292. vº. [verso]
Unos documentos que aporta más datos interesantísimos para conocer la historia de nuestro pueblo.